POR JOSÉ RAFAEL LÓPEZ PADRINO – TAL CUAL DIGITAL - Chávez a raíz de su enfermedad ha montado todo un show mítico-religioso donde participan desde curas hasta brujos (como Santeros y Paleros) el presidente ha descubierto su debilidad por la brujería haciéndole invocaciones a Yemaya y entre otras deidades
Enfrentado a una batalla contra el cáncer, manejada dentro del más puro secretismo, el tte coronel nos ha mostrado una nueva faceta de su socialismo bolivariano.
Nos referimos a un socialismo "sincrético" lleno de ambigüedades y de elementos ideológicos contradictorios, que se nutre con pensamientos de Marx y de Jesús de Nazaret, de invocaciones a los espíritus de la sabana, de plegarias a José Gregorio, de rezos ecuménicos, de súplicas a Oshún, así como de "Bilongos" organizados por santeros y paleros.
En fin una recopilación de símbolos y rituales (rezos, ensalmos, conjuros) propios del más puro pensamiento mágico basado en creencias erróneas o en tradiciones culturales las cuales carecen de toda fundamentación científica.
El iletrado de Miraflores ha protagonizado a raíz de su enfermedad, todo un estrambótico show míticoreligioso con la participación de curas, pastores evangélicos, chamanes, babalaos y brujos de diversas nacionalidades. Atrás quedaron sus prédicas a favor del marxismo, y sus continuas referencias al materialismo histórico y dialéctico.
Obviamente, la superstición del vocinglero de Miraflores está en franca contradicción con el materialismo histórico-dialéctico, pilares fundamentales del pensamiento marxista.
La concepción dialéctica se opone al pensamiento mágico-religioso, pues considera que no existe más realidad fundamental que la materia; entendiéndose a está no como una realidad inerte, sino dinámica, que contiene en sí la capacidad de su propio movimiento (tesis, antítesis y síntesis).
La dialéctica, a diferencia del pensamiento mágico, concibe la realidad como un proceso material en el que se suceden una variedad infinita de fenómenos a partir de otros preexistentes, regulado por leyes que determinan su evolución.
La inesperada enfermedad del tte coronel ha puesto al descubierto su debilidad por la brujería, por el pensamiento mágico y la superstición. La atracción del comandante-presidente por esos rituales son vox populi, basta con recordar la exhumación de los restos del Padre de la Patria luego de 134 años de haber sido llevados al Panteón Nacional.
Fue una demostración clara e inequívoca de la hechicería política que promueve el facho-chavismo bolivariano.
¿Cómo entender a un marxista confeso involucrado públicamente en el ocultismo y liturgias propias de otras expresiones mágicoreligiosas? Proclamarse marxista (sin haber leído a Marx) y recurrir al mismo tiempo a un sincretismo religioso donde se mezclan plegarias a Jesucristo con invocaciones a Yemaya, reflejan una terrible orfandad ideológica, así como una severa indigencia intelectual por parte del inquilino de Miraflores.
Ausencias que son extensivas a todo el combo de serviles que lo acompañan en su fétido y opresor proyecto fachomilitarista.
El socialismo bolivariano constituye una nueva falsificación histórica de la utopía del viejo Marx, como muchas otras del siglo pasado.
Enfrentado a una batalla contra el cáncer, manejada dentro del más puro secretismo, el tte coronel nos ha mostrado una nueva faceta de su socialismo bolivariano.
Nos referimos a un socialismo "sincrético" lleno de ambigüedades y de elementos ideológicos contradictorios, que se nutre con pensamientos de Marx y de Jesús de Nazaret, de invocaciones a los espíritus de la sabana, de plegarias a José Gregorio, de rezos ecuménicos, de súplicas a Oshún, así como de "Bilongos" organizados por santeros y paleros.
En fin una recopilación de símbolos y rituales (rezos, ensalmos, conjuros) propios del más puro pensamiento mágico basado en creencias erróneas o en tradiciones culturales las cuales carecen de toda fundamentación científica.
El iletrado de Miraflores ha protagonizado a raíz de su enfermedad, todo un estrambótico show míticoreligioso con la participación de curas, pastores evangélicos, chamanes, babalaos y brujos de diversas nacionalidades. Atrás quedaron sus prédicas a favor del marxismo, y sus continuas referencias al materialismo histórico y dialéctico.
Obviamente, la superstición del vocinglero de Miraflores está en franca contradicción con el materialismo histórico-dialéctico, pilares fundamentales del pensamiento marxista.
La concepción dialéctica se opone al pensamiento mágico-religioso, pues considera que no existe más realidad fundamental que la materia; entendiéndose a está no como una realidad inerte, sino dinámica, que contiene en sí la capacidad de su propio movimiento (tesis, antítesis y síntesis).
La dialéctica, a diferencia del pensamiento mágico, concibe la realidad como un proceso material en el que se suceden una variedad infinita de fenómenos a partir de otros preexistentes, regulado por leyes que determinan su evolución.
La inesperada enfermedad del tte coronel ha puesto al descubierto su debilidad por la brujería, por el pensamiento mágico y la superstición. La atracción del comandante-presidente por esos rituales son vox populi, basta con recordar la exhumación de los restos del Padre de la Patria luego de 134 años de haber sido llevados al Panteón Nacional.
Fue una demostración clara e inequívoca de la hechicería política que promueve el facho-chavismo bolivariano.
¿Cómo entender a un marxista confeso involucrado públicamente en el ocultismo y liturgias propias de otras expresiones mágicoreligiosas? Proclamarse marxista (sin haber leído a Marx) y recurrir al mismo tiempo a un sincretismo religioso donde se mezclan plegarias a Jesucristo con invocaciones a Yemaya, reflejan una terrible orfandad ideológica, así como una severa indigencia intelectual por parte del inquilino de Miraflores.
Ausencias que son extensivas a todo el combo de serviles que lo acompañan en su fétido y opresor proyecto fachomilitarista.
El socialismo bolivariano constituye una nueva falsificación histórica de la utopía del viejo Marx, como muchas otras del siglo pasado.
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